Una cierta
obsesión por el espionaje es el hilo conductor de la alocada
tensión de la trama de Miguel A. Lamata. Todo el mundo
espía a todo el mundo para sacar tajada y
convirtiendo una especialidad compleja como debe ser el espionaje en un vulgar y elemental enredo. Caricaturas donde no faltan el escritor, el estudiante, el
rockero, el boxeador
gay en un desfilar inagotable de actores televisivos como
Fele Martinez,
Amaia Salamanca, Salome
Jimenez o
Adam Jezierski.
Una novela sobre sexo llevada al cine escrita por una mujer y un encuentro casual generara una catarata de tonterías y cameos entre los que encontraríamos alguna pequeña sonrisa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario