El buen suspense con que ha dotado Mike Flanagan el film, es la base para cuando llega su dilapidacion en la segunda y tercera parte, quede un pósito que impida el destroce. El film en su parte final coge un reprise enloquecido hacia un final de locura enfermiza. Porque en las partes finales de los thrillers,aunque sean de terror, cuando se atan cabos, se relacionan datos que se "intercambian" con el espectador para que este saga mas satisfecho de haber acertado una mayor parte de la narración.Film superior a la Ouija del 2014, aunque también abusa de los sustos enlatados o logrados técnicamente, además de conectar emocionalmente intentando anclar en el animo cinéfilo.El marido de Alice ha sido asesinado, y a ella sola le cuesta cuidar de sus hijas. Para ganar dinero, ofrece sesiones de espiritismo a quien quiera despedirse de sus difuntos, pero no consigue prosperar, por lo que compra una ouija como golpe de efecto. Así, el negocio despega, pero a cambio empiezan a ocurrir cosas extrañas en la casa y Doris, su hija pequeña, es poseída por un espíritu maligno. Ayudada por un sacerdote, Alice intentará devolver a la malvada presencia a su lugar de origen. El film nos lleva hasta los años sesenta y que explora la superstición y el misterio alrededor de este tablero (hoy en día, propiedad de Hasbro) en una de sus épocas de mayor apogeo.A mi me daba miedo cuando en el hall del hotel, la tabla y un vaso de agua,acertaba dia si i dia no, el vencedor de la etapa de la Vuelta ciclista a Catalunya. . Elizabeth Reaser (Hello, My Name Is Doris) se convierte en la cabeza de familia que verá cómo su hija pequeña Doris (el personaje que enlaza con la primera entrega), interpretada por Lulu Wilson (Líbranos del mal), es poseída por un espíritu maligno con la figura de Doug Jones (La cumbre escarlata). Para salvarla, contará con la ayuda de un sacerdote al que da vida Henry Thomas (Querido John) y de Annalisse Basso.
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