Eso, y que muchos todavía creen en la resurrección de la carne de la serie B, convertida en un zombie a buen precio que llena las cinematografías nacionales (en este caso, Australia) de películas a medio camino entre la broma y el homenaje a todo..
Pelicula, frenética, con poca consistencia y la desconcertante presencia de Monica Bellucci como mujer diabólica, son muchos los flecos que quedan sueltos en este segundo largometraje de Kiah Roache-Turner (Wyrmwood: La carretera de los muertos) que juega a la caza de muertos vivientes llenando a la pantalla de perdigones.
Elegido el demonio que tiene,que controlar la Fuerza, peinada a la luz de Resident Evil, viajes por la red, armas de superhéroes y despertares de la carne estilo Re-animator. Todo para vestir la crítica a la vida virtual, que desaprovecha un inicio de sol y la Trilogía del Cornetto con un barquillo revenido y el corte de tres sabores olvidado en el congelador de los chistes de buddy movie. Que el amigo del protagonista sea aborigen, y se convierta en fantasma tiene su aquel, pero, como al resto del filme, le faltan arrestos para pasar de la mera broma.
Spoiler.-
Finnegan (Monica Bellucci) es una de las mejores cazadores de demonios, quienes son conocidos como Nikromantes. Una batalla que ahora se libra a través de la web, en una lucha entre el bien y el mal digital. Un desafortunado trabajador del servicio de alcantarillado descubre que es el único con habilidades suficientes para frenar a las malignas criaturas. ¿Conseguirá algo?
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