Aronofsky nos oferta un filme conmovedor, áspero, a veces incómodo y finalmente humanista. Aronofsky ha logrado una de sus mejores películas, y lo hace comandado por la interpretación ballenacea de Brendan Fraser" No hay nada que irrite excesivamente, aunque tampoco que apasione. La protagoniza Brendan Fraser. Su cuerpo asusta, pero su rostro y su voz expresan con talento, sensibilidad . Es lo que más gusta de 'La ballena'.. Es un escaparate de los impulsos más manipuladores de su director. ‘The Whale’ no es más que un ejercicio de miserias disfrazado de oda humanista. Quizá el único reproche sea a su director, ese Aronofsky descarado, efectista y provocador que encuentra su estatua de la libertad en el corpachón deformado de Brendan Fraser y su ansiedad de autodestrucción.. 'The Whale' llama la atención por el trabajo de Brendan Fraser Lástima que el potencial de complejidad de su personaje se vea lastrado por un guion empeñado en enfatizar su dimensión beat.
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