Nagore

La ciudad en la que Nagore Laffage fue asesinada el 7 de julio de 2008,Pamplona, acogió ayer la presentación del documental de Helena Taberna, que llega hoy a las salas de cine y que será proyectada en Irun con la asistencia de la familia, arropada por representantes de la vida social y política de la ciudad bidasoarra. Una película con la que la realizadora navarra quiere dejar memoria de lo ocurrido y "ser correa de transmisión" de la lucha incansable que la familia de la joven irundarra inició aquel día negro que quisieran borrar para siempre, pero que se resisten a que se olvide. "Que todo el mundo se entere de lo que pasó", decía ayer Asun Casasola tras el pase de la película en los cines Golem Yamaguchi de Pamplona. La madre de Nagore Laffage, visiblemente cansada pero sacando fuerzas en todo momento para continuar con su empeño, aseguró que "a pesar de los palos" que se ha llevado, "todavía" confía en la justicia. "Espero que el Tribunal Supremo vea los informes de la Policía Foral y de los forenses y salga la palabra asesinato, porque yo lo tengo muy claro", dijo respecto a la revisión del caso de su hija, fijada para el próximo día 25. "Si al primer golpe Nagore hubiera muerto yo no estaría aquí, pero yo sé que mi hija sufrió, que se enteró de todo", afirmó. Mientras espera a que se estudien los recursos de ambas partes, la madre de la joven irundarra que en los Sanfermines de hace dos años murió a manos de José Diego Yllanes se mantiene en pie gracias a los numerosos apoyos que recibe, como el que le ha brindado Helena Taberna con su película. "En cuanto me propuso el proyecto, le dije que adelante. Conocía sus trabajos anteriores y confiaba en su criterio", dijo Casasola, quien más allá de su lucha personal, quiere que la película tenga resonancia y "que haga reflexionar, que se tome conciencia de que algo está fallando para que esto pase, y que si le pasó a Nagore, le puede pasar a cualquiera", para que no se produzcan muertes trágicas como la de su hija.

El estreno de la película, que relata los hechos y recoge testimonios de familiares y amigos de Nagore y de las partes implicadas en el proceso judicial, llega con preguntas sin resolver. La más difícil, "¿por qué alguien que lo tiene todo pudo hacer algo así?", dijo Asun Casasola. La directora de la cinta se reconoció "incapaz de comprender esta violencia, que parece claramente que viene provocada por ese no de Nagore", y añadió que "es posible que el origen esté en la clase social y el machismo, en esa sensación de superioridad".