Conocer otras culturas a través del cine es muy interesante. Pero verse las con una teleserie de un país exótico puede no ser lo tanto. En primer lugar por su duración y en segundo por las particularidades que no implican de momento al espectador.Una Deepa Metha empalagosa dirige este producto Bollywood con exceso de sentimentalismo, ocultando bajo un exotismo exacerbado, los verdaderos problemas de la India y su reciente historia. Arranca el día 15 de agosto de 1947, cunado consigue la independencia de Gran Bretaña. A través del intercambio forzado de dos recién nacidos de distinta clase social, el film buscara sus verdaderas identidades así como la de país. Shalman Rushdie, novelista 1980 que vendió sus derechos por un dolar, productor, guionista (dos años) y narrador hace tantas cosas que se acelera y todo ocurre a una velocidad supersónica. Una vorágine de 4 décadas de paradas militares, brujería, imagineria, mendigos callejeros o horrores de la guerra se combinan con problemas familiares y reuniones internacionales interpretados por personajes que ni sabemos quien son ni nos consigue importar. La situación de la mujer sometida ya la trato la directora canadiense en Agua, Fuego y Tierra, en lo que aquí aparece como una mera simplificación. Mezclolanza de géneros con los que que lidian profesionalmente como pueden Satya Bhabha, Sahana Goswami, Rajat Kapoor y Shabana Azmi. .
miércoles, 10 de julio de 2013
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