Largo viaje hacia la noche

Ese director que se situa personalmente entre Wang Kar Wai y Jean Pierre Melville,  es un maestro trucando secuencias en 3D. Declarado neoromantico, narra su historia como un sentimiento inspirado en la experiencia vital. Un hombre solitario, atormentado por la culpa y el arrepentimiento, ha decidido volver a Kaili, su ciudad natal en el suroeste de China, muchos años después de haber huido de allí. El motivo de su regreso es intentar encontrar a Wan Qiwen -así se hacía llamar-, la enigmática mujer que una vez amó y no ha podido borrar de su mente. En su búsqueda iniciará un viaje a través de sus recuerdos donde pasado y presente se encuentran confunden entre la realidad y los sueños. Aplaudido con en los festivales de Cannes y San Sebastián, el segundo largometraje de Gan Bi (Kaili Blues) deconstruye los fundamentos del cine negro para dar forma a una historia repleta de poesía, encanto, romanticismo y audacia amarilla. Decidido a mejorar sus prestaciones como cineasta, Bi firma una película de gran belleza e impecable factura técnica, donde destaca un plano secuencia en 3D de más de 50 minutos de duración que desafía el espacio, el tiempo y la gravedad. Las emociones que suscitan las pinturas de Marc Chagall y las novelas de Patrick Modiano inspiran al realizador y constituyen el núcleo de esta experiencia cinematográfica donde lo sensitivo importa más que el argumento. De este modo, el interior de la mente humana y el mundo de los sueños adquieren entidad corpórea a través de las imágenes, cautivadoras y oníricas, que ilustran el viaje de un hombre en busca de la mujer que una vez amó. Dividida en dos partes (la primera sobre el tiempo, la segunda sobre el espacio), pero ambas con el poder de los recuerdos como tema principal, cuenta como protagonistas con los reconocidos actores chinos Wei Tang (Blackhat: Amenaza en la red) y Jue Huang. Tardan en entrar en accion lo que tardan siempre las peliculas asiaticas(esta de 133 min.), solo que a veces no hace falta esperar y en esta si.Precisamente por  us lentitud el film se entiende a la primera, no tanto el juego que propone el espectador. Y no todos tienen ganas de "jugar"