Un protagonista de instintos progresistas chocan con el reaccionario espíritu de la Iglesia como institucion corrupta, dispuesta a perdonar todo pero cortocircuitando la relación con el estamento. En el fondo esta la protección de la homosexualidad, especialmente la traumática. Film pero con buenas intenciones que pretende profundizar en un tema tabú y no escandalizar. Una estética muy delicada no acompaña el contexto social en que se producen los hechos y parece mas una comedia romántica que la complicada historia en una rural Polonia. Silencios y miradas, especialmente entre hombres, denuncian el excesivo metraje en algunas ocasiones. El máximo exponente es la atracción del sacerdote por el joven conflictivo del que es tutor. Ni curas escondidos en armarios ni pedofilia consentida es con lo que no quiere polemizar la directora Malgorzata Szumowska. Simplemente desvelar la lucha interna del sacerdote entre amar a dios o al hombre. O a los dos. La directora polonesa, después de Ellas analiza la homosexualidad en la religión, bien ayudada por Andrzej Chyra,Mateusz Kosciukiewicz, y Lucas Simlat
domingo, 12 de octubre de 2014
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