No es habitual que los comentaristas dediquen tanto espacio a un film de animacion ni siquiera que esta haya sido muy bien promocionada. Pero esamos ante una produccion Ardman, con unos personajes casi tan solidos como los de la rebelion en la granja, cuando no supera algun flojo gag con algun golpe de guion. Ambientada en una supuesta invencion del futbol en la era prehistorica, contiene gags increibles y sutiles como el de la repeticion de las jugadas. Pero mientras tanto las dos tribus rivales se entrenan en sus vetustos campos, mientras la historia ya vislumbra la edad de bronze, Nick Park, sinonimo de plastilina animada, esta muy atento a la gestualidad, a los fondos, a la luz, ncluso a las canciones que animan la sesion desde Wallace y Groomit. Personalidad en sus productos que respiran globalidad en una hibrida mezcla de humanos y animales. Y detalles para no despegarse del futbol. Reconocemos al gran goleador, el estilo de juego de un equipo mas tecnico, el entrenador alterado, y asi se va nutriendo este artesano stop motion. Un desafio al cine moderno y que su lentitud es bien aceptada porque es inspirdora como aquel bourbon de Kentacky.
domingo, 4 de febrero de 2018
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