The Florida project

Alla, donde la America es luminosa pero triste, pintan los moteles de color rosa y con algunos rotulos fluorescentes, acogen a los que no  encuentran sitio en un parque de Disney o no pueden pagarlo. Un gerente, una madre modelo de nada, que consigue con formas discutibles, dinero para pagar la noche y se las ingenia para que coma, aunque mal, su hija Moonee. La camara como de gran angular, va de la niña al encargado y vislumbra en cada barrido el presagio del drama. Los dos amigos de la niña, creen que su libre deambular/abandono por los parques es la felicidad, coman con los dedos o no. Minuto a minuto, dia a dia, el film sigue el devenir del pequeño grupo, que venden perfumes, hacen la carretera, piden caridad, estafan entradas o ahuyentan pedofilos -cuervos. La niña piensa vivir feliz entre mermeladas derramadas, pizzas y zumos, con su joven madre y una pelea contra el mundo  a cada instante. Resulta curioso como Moonee, imita a su madre para dirigir o defender su grupo. Espacios bajos, ocupables, listos para allanar e incendiar, de paso y camas calientes, son otro de los magnificos actores que los anidan. Construyen un mini nido con el hilo invisible de la mirada infantil. Sean Baker cierra bien el parque para que los niños no puedan escapar, sin control, siempre al borde del abismo paradisiaco. Moonee es una niña de seis años que sueña con ir a Disneylandia, pero lo más cerca que ha estado es el barato motel a las afueras de Orlando en el que vive con su madre, una joven de 22 años. Lo más parecido a una figura paterna que ha tenido es el gerente del albergue. El verano promete estar cargado de aventuras cuando otra niña de su misma edad se muda al motel de al lado, mientras los adultos viven tiempos difíciles y luchan por conseguir un techo bajo el que cobijarse. The Florida Project cuenta una historia basada en la crisis social y económica de muchas familias sin recursos que se ven obligadas a refugiarse en los moteles baratos que rodean la ciudad estadounidense de Orlando (Florida), uno de los principales destinos vacacionales de EE.UU. y sede de Disneyworld, "el lugar más mágico del mundo". Sean Baker (Tangerine) escribe y dirige este largometraje, uno de los más destacados del año en el circuito independiente, que ha conseguido una nominación al Oscar en la categoría de Mejor actor de reparto por la interpretación de Willem Dafoe (Asesinato en el Orient Express). Con humor y nostalgia, los niños que viven en estos hospedajes, que se han convertido en el último refugio para quienes ya no pueden asegurarse una residencia permanente, son los verdaderos protagonistas de la cinta, cuyas aventuras chocan con la difícil situación de los adultos. La trama retrata así una cruda realidad en Estados Unidos, donde lugares como el Magic Castle Motel se han convertido en alojamiento de personas completamente olvidadas por su país. Además de Dafoe, el reparto está encabezado por la pequeña Brooklyn Kimberly Prince y la debutante Bria Vinaite.