Mientras trabajan, unos obreros descubren en un apartamento de Copenhague una habitación oculta tras una pared falsa con tres cadáveres sentados alrededor de una mesa y una cuarta silla vacía. El caso va a parar a manos del detective Carl Mørck y su asistente Assad, que intentarán esclarecer el misterio tras estas muertes y encontrar al superviviente en una carrera a contrarreloj para evitar más asesinatos. Sus pesquisas los llevarán hasta una isla donde se llevaban a cabo experimentos médicos. Christoffer Boe (Todo irá bien), años atrás gran promesa del cine escandinavo, toma el relevo de Mikkel Norgaard y Hans Petter Moland y dirige la cuarta entrega de la saga basada en las novelas de Jussi Adler-Olsen. Tras Misericordia, Profanación y Redención, pone ante el detective Mørc, un nuevo caso. Tres cadáveres momificados, y la amenaza de una nueva serie de asesinatos, convertirán esta investigación en una carrera contra el tiempo para descubrir al culpable de las muertes, que parece estar relacionado con uno de los episodios reales más negros de la historia danesa reciente: el de la isla de Sprogø, donde entre los años 30 y los 60 se realizaron experimentos de esterilización forzada. El resultado es un thriller nórdico que transita entre dos épocas distintas, no escatima en violencia y alberga una reflexión política sobre cómo el pasado oscuro de Dinamarca se refleja en el actual auge de la extrema derecha. Nikolaj Lie Kaas (El niño 44) y Fares Fares (El Cairo confidencial) repiten en sus roles y son secundados por Nicolas Bro (Nymphomaniac. Volumen 1) y Fanny Bornedal.
lunes, 17 de diciembre de 2018
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