Si les digo que la autora de este cansancio es Stephenie Meyer de Crepúsculo ya podríamos dar por terminado el comentario. Si añadir que en vez de succionarte la sangre, aquí unos alienigenas te abduyen el alma. Para acabar de arreglarlo, hay una lucha dialectal fratricida entre el cuerpo y el alma okupa. Y en la dirección de Andrew Niccol (Gattaca) se ven inmersos los sugerentes Diane Kruger, Wliam Hurt, Jake Abel, Saorsie Ronan y Francesc Fisher y Max Irons. Rebusca el film en el cine fantástico de los 50 sin identidad y recurriendo a la voz en off que lo hace todo entendedor. Blancos, impolutos, puros y no violentos son los invasores que para algo son almas. Un trio movie con el cuerpo de la protagonista, su alma y el alma invasora que intenta borrarle recuerdos. No hacia falta un alien para borrarnos este film tan pureta.
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