Rush

Como han avanzado las tecnicas de rodaje de la Formula 1 desde aquel Gran Prix de 1966 de John Frankenheimer. Captan la realidad, sentados en una cabina, con el chirriar de las ruedas duras o blandas y como rugen las marchas en las curvas reduciendo a toda velocidad. Pero Ron Howard absorto en la técnica se olvida del pilotaje. El factor humano que en muchas ocasiones decide el resultado y el vencedor. Director exigente con sus historias, Frost contra Nixon, Cocoon, Una mente maravillosa, The paper o 1,2,3, ....splash, consigue una película larga pero amena, visualmente impactante en las escenas de acción, gracias a una producción espectacular, pero en la que un cierto publico encontrara a faltar el exceso de Taxi por ejemplo. Consigue emocionar a pesar de la frialdad con que las escuderías tratan de cumplir sus objetivos. Tampoco investiga el porque estos hombres arriesgan sus vidas por un podio. Pocos diálogos pero efectivos nos hablan del estres pre salida o la atracción del juego con la muerte. Los pilotos suelen ser de una raza especial inmersos en un mundo de lujo y placeres.Film que dejara impávido al espectador que no sigue las retransmisiones por television de la F1, pero que le interesara su otra narración del guionista Peter Morgan. Para ello presentan dos personajes desagradables y duros Chris Hemsworth (James Hunt) y Daniel Bruhl, (Niki Lauda) que reducen sus interpretaciones a una catalogo de manías, disciplina y métodos para superar al contrario, tanto que los distancia del publico al que querían llegar. La leyenda de esta competitividad entre los dos ídolos quedo plasmada en numerosos documentales en blanco y negro, eran los años 70, breves trozos de los cuales se utilizan en el metraje del film. Un duelo en la pista donde no hay un malo per se. Pero son bebedores, les gustan las mujeres, esquivos, antipáticos, peleones y atractivos, cuando se encuentran en el ambiente del paddok de la época. Sin humillaciones, pueden parecer hasta nobles, como el film