Baghead, rodada en 2008, año en que tras la celebrada The Puffy Chair, los hermanos Duplass, Mark y Jay, se marcan un particular second coming que a su vez representa una relativa salida por la tangente. Un quiebro que cuenta la historia de cuatro amigos aspirantes a cineastas que deciden dar el salto definitivo al estrellato poniendo tierra de por medio y largándose una semana a una cabaña del bosque al más puro estilo de todo lo ya visto. Allí, por supuesto, las cosas empiezan a ponerse bastante feas. Y es que situándose a medio camino entre la comedia y el cine de terror, Baghead haría las delicias de cualquier adicto al found footage disparatado gracias a su estética desmadejada y su gestión aparentemente timorata de las secuencias de suspense. Un híbrido despeinado de géneros que, de nuevo, vuelve a enmascarar, y ahí la gran alegoría de la película, los miedos, dudas y tonterías existenciales que comporta el paso de la edad adulta y lo hace una vez más con la complicidad familiar de los compañeros de batallas Steve Zissis, Ross Partridge, Elise Muller y, sí, Greta Gerwig).
viernes, 15 de noviembre de 2013
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