Blue Jasmine

Feroz y cínica la carga de Woody Allen contra esta dama digna de la alta sociedad norteamericana de Nova York, que lo pierde todo, marido, status, mansión y debe rehacer su vida olvidando su pasado. Allen se lo planteara en San Francisco, la ciudad quizá mas europea de los EUA. En esta entrega anual, Cate Blanchett es el ligero y sensible retrato femenino elegido por el director, que despiadado y complejo, nos libra para contemplar y analizar. Mas drama que comedia, pone esta en las espaldas de la hermana y uno de sus amantes con la magnifica sensacion de que de nuevo el casting es una de las virtudes de Allen. Cada nueva obra de Woody Allen resume, amplifica y sedimenta sus teorías sociales, profundiza y enfatiza la comprension de sus protagonistas, pero se acerca a la gran tragedia alleniana que algún día, a bocajarro, nos ofrecerá. Con desolación y un gran tono, sin respiro abandona al espectador en su indefensión con solo el flotador del humor amargo. Utiliza su manual de personajes de NY, el millonario inolvidable, el político ambicioso y ocurrente, y la cercana mujer a la que complacen los vestidos de diseño que buscan sus sueños en las calles de la metrópolis.Quizá nunca había abusado tanto de las casualidades y coincidencias que falsean un poco la habitual agilidad de su relato y proceso narrativo. También es verdad que sin forzar tanto el guión nos perderíamos algunos engaños importantes de la protagonista. Con las dos mujeres infelices, nos muestra al mismo tiempo los modelos de la desventura y de como puede llegar a ser el feminismo de interesado. Pero no se queda en el negocio hundido, sino que nos sumerge en un mundo de miradas y malos entendidos que le proporcionaran las peores criticas de parte de sectores ya conocidos y que el agradecerá en lo mas profundo de su talento. En manos de Allen, Alec Bladwin, Sally Hawkins, Peter Sasrgaard, Alden Ehrenreich, Louis C.K, Bobby Cannavalle, y Max Casella, siguen su camino imparable hacia el estrellato como actores, sobrando para algunos los elogios pues ya han llegado.