martes, 1 de abril de 2014

Ida

A través de la relación de dos mujeres, el magnifico director, como todos los poloneses, Pawel Pawlikowski, (La mujer del quinto), ciudadano británico, nos muestra la crisis política de una tia, una juez alcohólica de tendencias comunistas, y la crisis religiosa de su sobrina novicia de origen judío. Todo ello sumergido en el holocausto y la guerra presentes todavía en el imaginario colectivo mientras buscan la tumba de sus padres asesinados en la contienda. Rodada como un documental expresionista es una esplendida visualizacion de los sentimientos que diferencia entre al vida real y la monástica. A ello le ayudara el encuentro en un club nocturno con un músico de jazz con el que surgirá una atracción inmediata. Estamos en la Polonia de los 60. Y el cine, con espacios en el encuadre, con iluminacion nítida sin el contraste del color, la estética irreprochable y los actores en un festival de resortes de la memoria dolorosa. Agata Trzebichowska es la huerfana, rebautizada Anna en el convento a la que se permite salir con 18 años, para  encontrarse con su verdadera historia de Ida Lebenstein. La acompañan en su ritual mortuorio Agata Kulezsa, Joanna Kulig y David Ogrodnick.

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