Violette Leduc (1907-1972) es una escritora que progreso a la sombra de Simone de Beauvoir, intempestiva, solitaria, ávida de sexo, con ansias de amor de amor y que obtuvo el reconocimiento literario con su segunda obra. En la primera, especie de autobiografía , ya había expresado sus delirios (La hambrienta 1948). Nunca comprendere porque en un tema cultural y didáctico como puede ser este, se aumenta el voltaje literario de los diálogos, se espacian los planos y se sustentan en travellings interminables, dejando ver al fondo , los datos, los edificios y la historia. Esto diluye también, el duelo interpretativo entre las dos grandes actrices, Emmanuelle Devos y Sandrine Kimberlain. Martin Provost, vuelve a acercarnos a una artista, después de Seraphine en el 2008 sobre la pintora de Senlis. Para ser un biopic faltan algunos detalles biograficos y sobran algunos matices psicológicos que no justifican nada. Para descubrir de donde procede la creatividad quizá una escritora poco prolija no es el mejor de los métodos.Ni nace de la exclusión social seguramente, ni de la humillacion familiar. En este contexto descentrado tampoco están muy creativos Jacques Bonnaffe, y Olivier Gourmet.
jueves, 19 de junio de 2014
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