Amar, beber y cantar

No disimula en absoluto en su póstumo film Alain Resnais, miembro de la Nouvelle Vague y desaparecido el 2014, la adaptacion de la obra del dramaturgo Alan Ayckbourn del que ya había adaptado Smoking/No smoking. El teatro filmado vuelve a forzar sus limites, con unos decorados de foto fija, unos dibujos de cuento y una representacion humana excelente. Tres parejas maduras regresan a Yorkshire para compartir los últimos días de un amigo enfermo. Un seductor contumaz que abre la posibilidad de haberse relacionado con todas sus amigas, lo que posibilita al film una lucha de egos. Ocuparan su tiempo de espera en unos ensayos  de la compañía con Sabine Azema, esposa y actriz desde 1998, Andre Dussolier, Hyppolitte Grardot,Sandrine Kimberlain o Caroline Silhol. Lo mejor del film, la translación que hace Resnais de pasar de la realidad a la fantasía obligando al espectador a no darse un respiro. El tal George, que no aparecera en todo el film descerraja el baúl  de los recuerdos del que salen infancias, colegios y demás secretos psicológicos y de pubertad. Con 92 años, Resnais (Hirosima Mon amour,) demuestra que no es su obra póstuma, porque tenia muchos otros proyectos en la carpeta del cine versus teatro. Burguesía con cosas que ocultar, campiñas que muestran el paso de las estaciones de la vida y la liquidacion de cuentas de un Resnais que ya no acudió al estreno, pero que nos despidió con su esperpentico humor, su drama reflexivo y su comicidad inteligente.