WHITE BOY RICK

De la droga en la calle al FBI. Hijo de un hombre tan embaucador como idealista que se desvive porque su familia siga unida y no pase las mismas penurias que él, Richard "Rick" Wershe Jr. se convirtió, a sus 14 años, en el informante infiltrado más joven de la historia del FBI. Durante los turbulentos años 80, cuando la fiebre del crack y la guerra contra la droga estaba en pleno apogeo en Detroit, este joven terminó siendo traicionado por las autoridades y su gobierno, detenido por narcotráfico y condenado a cadena perpetua. En apenas tres años, Richard Wershe Jr., alias White Boy Rick, pasó de ser un adolescente más de una familia humilde de Detroit a convertirse en un conocido traficante de drogas y formar parte de las corruptas élites políticas de una ciudad consumida por el crack y la violencia. Aunque podría ser el argumento de un thriller criminal de los 80, esta historia está basada en hechos reales, los que rodearon a este informante del FBI, el más joven de su historia, que, tras informar de los trapicheos del narcotráfico a las autoridades, terminó siendo encarcelado por aquellos para los que trabajaba. Además de hablar sobre injusticia social, juegos de lealtades y traiciones, corrupción política o desigualdades raciales y de clase, el segundo largometraje de Yann Demange, alberga un emocionante drama familiar que se centra en la relación entre un idealista y ambicioso padre y su hijo, al que contagiará la obsesión por alcanzar el sueño americano. El debutante Richie Merritt protagoniza el film con la interpretación de Matthew McConaughey, Jennifer Jason Leigh (A la sombra de Kennedy) y Bruce Dern.