amor a segunda vista

De la noche a la mañana, la vida de Raphaël, escritor de novelas superventas, da un giro de 180 grados. Se despierta en el apartamento de su mejor amigo, inmerso en un mundo paralelo en el que es un común profesor de secundaria y, lo más grave de todo, en el que el amor de su vida y esposa, Olivia, no le reconoce. Ahora que se ha convertido en un completo desconocido para ella, no sabe cómo recuperar su amor. Pero el único modo de regresar a su vida anterior será reconquistándola. Antes incluso de estrenar su primera película, el director francés Hugo Gélin, que conoció muy joven a su mujer, se había planteado la duda de en qué se habría convertido su vida sin ella y trató de llevar a la gran pantalla una historia que partiese de esta premisa. Trató de escribir un guion al alimón con el novelista y director David Foenkinos, pero el proyecto no les convencía y no ha sido hasta después del éxito de Mañana empieza todo, su anterior película, que Gélin retomó el proyecto, ahora con la ayuda de los guionistas Igor Gotesman y Benjamin Parent. Amor a segunda vista es una comedia romántica con elementos fantásticos, algo inusual dentro del panorama cinematográfico francés, pero mucho más común en Hollywood, con ejemplos tan notables como 50 Primeras fechas, ¡Olvídate de mi! o Una cuestión de tiempo. De hecho, el propio Gélin es consciente de su deuda con el cine anglosajón, al que tributa con varios guiños: por ejemplo, el protagonista del film se llama Raphaël Ramisse, en homenaje al director de Atrapado en el tiempo, Harold Ramis. En cuanto a los actores, Gélin, después de haber trabajado con Omar Sy, pensó que era divertido descubrir jóvenes talentos. El elegido para encarnar a Raphaël ha sido François Civil (El canto del lobo), con quien había trabajado anteriormente en la miniserie Casting(s). Civil es un actor seductor y cómico al mismo tiempo, que combina a la perfección los diferentes géneros. Joséphine Japy, pese a su edad, tiene una gran experiencia.