No confundir con la excelente sobre el tema israeli de John Madden. Esta coproducción peruana-hispana de Barney Elliott, deriva a medida que avanza hacia el folletín televisivo. Con un flojo guión, unos minutos mas hubieran acabado con la carrera hasta ahora correcta, pero sin brillo, de Alberto Ammann, Stephen Dorff, David Starthairn y Carlos Bardem. Tantos mimbres para una cesta, que suelen ser sobrias y naturales producen que al final no quepan ni la fuerza ni la emoción. No se si la reforma agraria peruana de 1968 es el tema mejor para una opera prima. Y menos si se incluye a los americanos del norte, la deuda exterior, al cacique, al concienciado, la enfermera contra el sistema sanitario, los payeses, un niño, su llama, la gente mayor y los malos de corazón. Política social que denuncia la explotacion del payés por una multinacional muy poderosa. Todo empieza por unas tierras confiscadas y entregadas por el gobierno a los labriegos peruanos, en las que mira por donde, hay oro. Todo pasa por el turmix y queda lo que ahora damos en llamar un latinopudding. O sea el tópico atribulado.
viernes, 15 de mayo de 2015
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