lunes, 15 de febrero de 2016

La ley del mercado

A veces se fuerza el sentido social de un film, para obtener mas subvención del departamento correspondiente, tanto, que se desvirtúa y hace irreal la idea inicial del film de denuncia. Expuesta la injusticia con algunas cuñas de humor observamos con desolación como es de efímera no solo la vida terrenal sin también las clases y estructuras que nos parecían eternas y ahora están en trance de desaparecer.L a madurez y experiencia de Vincent Lindon, ganador en Cannes de la interpretación, ayuda un director, Stephane Brize, que le exprime al máximo, en su tercer trabajo juntos (Mademoiselle Chambon, Algunas horas de primavera) . Parecer ser que las tres desgracias que acechan a Lindon, son un hijo discapacitado, el paro de larga duración, ya lleva 20 meses, y estar casado con 50 años. Cuando consigue un empleo mínimo en un supermercado, sus jefes además del módico sueldo, le presionaran con elementos ajenos a la profesión laboral en si. Comparten esta sociedad sin demasiado futuro Yves Ory, Karine de Mirbeck y Matthew Schaller que aportan experiencia a un grupo de actores amateurs del supermercado que se interpretan a si mismos

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