Prevenge también destila bastante mala leche, de la más agria y maternal… La actriz y guionista británica Alice Lowe decidió aprovechar su propio estado de buena esperanza y, embarazada de siete meses, se puso manos a la obra, en su caso a rodar el que sería su debut en la dirección de largometrajes. Un par de semanas en la escritura del guion y un rodaje que duró solo 11 días.
¿La historia? Una mujer embarazada, interpretada por la misma Alice Lowe, cree oír la voz de su bebé aún no nacido desde el interior del útero y no para susurrarle cosas dulces y agradables sino para clamar venganza por la muerte de su padre. De esta manera, la futura madre se convertirá en una peculiar asesina en serie cuchillo en mano. Las referencias que tuvo en mente su autora son también de lo más exquisitas: La semilla del diablo de Polanski, Carrie de De Palma o El resplandor de Kubrick.
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