Su mejor historia

Coctelera de Lone Scherfig con amor, guerra, Londres y Billy Night. El resultado es que el cine es la mejor manera de pasar el tiempo en situaciones apuradas como bombardeos etc. La historia de una mujer en el fondo, Gemma Arterton que ha producido un avispado de origen hungares, cine dentro del cine, una catarsis romantica en la Inglaterra de la segunda guerra mundial. Y un guion que se  multiplica para no dejar recodos o angulos oscuros.  Nadie se acuerda ya, frente a este cine entendible, de los Dogma 95. Durante la II Guerra Mundial, cada vez más británicos parten al frente mientras los que se quedan en Londres, en su mayoría mujeres, niños y ancianos, afrontan los constantes bombardeos. Para levantar los ánimos de la población, el cine es la herramienta perfecta para infundir optimismo, pero el público demanda realismo. Por ello, una productora contrata a una joven secretaria para que escriba los diálogos femeninos de una película que no sólo inspirará a una nación, también cambiará su vida. Lone Scherfig (One Day) se traslada hasta el Londres de los 40 para contar un lado poco conocido de la retaguardia de la contienda, el de las productoras de cine que se encargaban de crear películas que levantaran el ánimo de una población golpeada por las bombas y por la marcha de sus seres queridos a las trincheras. A través del melodrama, dentro del que se desarrolla una historia de amor y momentos de un inteligente sentido del humor, Su mejor historia hace su particular homenaje al séptimo arte. A su vez, esta adaptación de la novela de Lissa Evans nos presenta un fuerte personaje femenino, interpretado por Gemma Arterton (Primavera en Normandía), que se enfrenta a los prejuicios de una sociedad que estaba a punto de iniciar un cambio en lo que respecta al rol de la mujer en la vida pública. Sam Claflin (Antes de ti), Bill Nighy (El nuevo exótico hotel Marigold) y Jack Huston (Ben-Hur) completan el reparto principal de este emocionante ejercicio de cine dentro del cine.