Tema recurrente para un dibujo de alta calidad. La perdida de un ser querido se representa a los que no solo quieren olvidar. La pieza original del film de Masaaki Yuasa es que para hacerse corporeos estos fantasmas utilizan el agua de cualquier lugar y espacio como riachuelos, lagos, estanques, bañeras y grifos o vasos. Con una musica de matraca, el film enseña como viven los bomberos, como hacer una tortilla y asi lograr que el guion de Reiko Yosida llegue al largo de pelicula anime. El bombero y la surfista sufren todo el mal del film, dejando para los demas, la comedia y el romance. Con referencias a estilos artisticos, (pop art, cubismo,...)una camara que nos pone en escena con su ubicacion, a veces impensable, y el impecable dibujo, tira al agua tambien un poco la historia por su sentimentaloide. Hinako, en la universidad de un pueblo de costa, se dedica a coger olas, haciendo surfing para olvidar sus problemas y carencias. Con motivo de un incendio, conoce al bombero Hinako, con quien tambien surfea. En medio de tanta felicidad, ambos se dan cuenta de que lo que quieren de verdad es ayudar a los demas. Sin olvidar lo emotivo de la perdida inicial. Si obviamos la poco creible amistad repentina entre los protagonistas, en franco desarrollo. Yuasa es un correcto narrador. Moralejas cursis si se quiere pero sencillas y eficaces, para quien sobreviva a la montaña rusa de temas.Reconocida en Shanghai y Sitges.
martes, 18 de febrero de 2020
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