Ridley Scott en la producción debería ser una garantía por su casi impecable trayectoria. Pero en la dirección hubiera dado mas color, ritmo y visos de realidad al film que Daniel Espinosa,(Dinero fácil, El invitado) el director. Pinceladas a la depauperada nación soviética. ahogada en burocracia y que consideraba el asesinato como una enfermedad capitalista, provocan que el film se estrelle en una maraña de thriller policíaco y drama social, con agujeros importantes de guión y un casting equivocado. Un asesino en serie va dejando niños asesinados desnudos junto a las vías del tren, 52 que se sepa, cosa imposible pues en la Unión no puede haber asesinos de ningún tipo como explica la novela de Tom Robin Smith basada en el carnicero de Rostov allá por los 50, y cuya falta de temperamento se intuye ya en las secuencias iniciales del registro a una granja. La presentación del protagonista por décadas le da un matiz histórico antes de sucumbir ante el interés de la relacion entre Tom Hardy y su esposa Naomi Rapace a quien debe investigar y posteriormente delatar. Gary Oldman, Joel Kinnaman, Paddy Considine, Vincent Cassel y Jason Clarke aportan su sentido de la interpertacion a estos 137 minutos.
lunes, 22 de junio de 2015
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