Un conocido centro para mujeres sin hogar, está a punto de echar el cierre debido a los recortes presupuestarios del ayuntamiento. Ante esta delicada situación, que dejará sin refugio a decenas de personas necesitadas, las trabajadoras sociales de esta institución se propondrán un reto casi imposible: reintegrarlas a todas en la sociedad antes de tres meses. Para conseguirlo todo vale, por lo que tirarán de ingenio y cualquier recurso que esté a su alcance, desde enchufes hasta engaños. La comedia revelación del año en Francia, la nueva película de Louis-Julien Petit (Carole Matthieu) está inspirada en el libro que Claire Lajeunie escribió como complemento de su documental Mujeres invisibles, sobreviviendo en la calle, donde recogía las historias personales de muchas mujeres sin techo de una manera conmovedora y, a pesar de lo dramático de sus situaciones, divertida. Tras más de un año inmerso en el día a día de los centros sociales, Petit vuelca esas lecciones de vida y las convierte en una inspiradora película donde un grupo de trabajadoras sociales harán cuanto esté en su mano para reintegrar en la sociedad a todas las personas necesitadas que dependen de un albergue que está a punto de cerrar. Lejos de caer en la autocompasión o sentimentalismos vacíos, el film, rebosante de optimismo, ofrece situaciones disparatadas regadas con un humor no exento de crítica social. Para los papeles protagonistas, el director reúne amateurs, como Patricia Mouchon o Khoukha Boukherbache, que han experimentado lo que significa vivir en la calle o en casas de acogida. Las profesionales son Sarah Suco (Llenos de vida) o Noémie Lvovsky.
viernes, 5 de abril de 2019
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