Nadie sabe nada de gatos persas

Mejor para Bahman Ghobadi la parte documental el film. Buen pulso a la parte musical, oculta a la policía de su país, que no mejora la parte dramática y que desemboca en una historia decepcionante y un poco contradictoria.

Una pareja salida de prisión forman un grupo musical underground, qe ensaya y actúa de forma clandestina en el actual Iran, donde la música es impura. En este sentido es un buen alegato contra la política cultural represiva del Islam.

El autor de Media luna, reune a HArned Behdad y Ashkan Koshanejad para viajar el kurdistan en autobús para interpretar un concierto. Una muestra de pop, indie, rap i rock de vanguardia que se elabora en Teheran.