Memorias de un zombie adolescente/Warm Bodies

Los zombies no existen, A no ser que sean actores o personal maquillado. De esta idea, Jonathan Levine, con una mano de humor hace un película por un usar un nominativo aceptado.  Levine, ganador del Premio del Público en el Festival de Cine de Sundance por el magnífico drama "The Wackness", se ha labrado una espléndida reputación en el universo indie con " 50/50", un drama desgarrador, basado en hechos reales. Pero su humos pasa por, bebiendo de fuentes católicas, aceptar que el mejor remedio para un zombie, como para un gai es una espectacular hembra y si es Teresa Palmer mejor. O sea para poder explicar las memorias y tener un final feliz hay que aceptar que la curación es posible. Estética shakesperiana para una carretera secundaria con infinito en el crepúsculo donde se acepta love story por amor con un recién muerto viviente. Responder con humor a un mundo aniquilado donde las fiestas son necrofilia, hace todavía mejor la predisposición ha participar en ella de NIhcolas Hoult, Dave Franco y John Mlakovich