Joseph Kosinski (Tron;Legacy) acierta al elegir la consciencia e Tom Curise para hacer ciencia ficción, adaptando su propia novela gráfica. Avezado a las escenas de acción desde su Samurai, ejecuta bien las mismas de un film oscuro en un mundo oscuro en el que como en un Bourne cualquiera puede perder los recuerdos y la identidad. Otro intento,mejorando su ultimo Jack Reacher, de conseguir emoción a través de la confusión narrativa con la técnica ambicionada.En una tierra del futuro del 2073 hay vestigios de una guerra perdida de unos pocos supervivientes contra seres foráneos. Cruise es un sencillo mecánico y vigía de drones que se aleja de personajes kubrikianos de su carrera. Kosinski y sus dos guionistas, como un elefante en un garaje han metido las patas en todas las fuentes de la ciencia ficción desde el Hal 900o al planeta simio. Para completar la especie aparece en esta arca de Noé apocalíptica y de lujosa producción, Olga Kurylenko, en esta semana aparece también en la de Malick, Morgan Freeman y Andrea Risoborough. Con elllos Zoe Bell, Coster Waldau i Melissa Leo.
martes, 16 de abril de 2013
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