Hoy este blog ha de estar tiznado de fútbol. Por la final de la Eurocopa y por el último filme del prolífico Fernando Colomo que suma su obra coral sobre el análisis de la rivalidad futbolistica a sus obras como La linea del cielo , Los años bárbaros, Tigres de papel, Al sur de Granada, Alegre ma non tropo , Bajarse al moro, Cuarteto de la habana, El efecto mariposa, El proximo oriente, Eso, La vida alegre, Miss Caribe y Rosa, rosae. Diferentes puntos de vista sobre las mismas cosas superando el caracter de anecdota. En el filme las peripecias de Ernesto Alterio superan dos pueblos las de Santi Millan,-que por cierto tiene que replantear su carrera-, y que aquí es un empresario de cava catalán enamorado perdidamente como siempre de una violenta azafata de vuelo - Kira Miro-, capaz de noquear a la guardia civil.
Abundan pues los chistes anticatalanes soportados estoicamente en representacion la gran actriz Rosa María Sarda en contraposicion a Alterio, padre superviviente con hijo camino de Sevilla y Jorge Sanz, simpático y moderno como siempre cuando interpreta el papel mas retrogrado de la función.
Para Colomo el resultado del match es lo de menos. Lo único que le interesa es mostrar los mecanismos y las pautas de comportamiento que mueven a los aficionados y algunos exacerbados espectadores sin pretender inducir al análisis sociológico del tema. Con estilo irónico, escritura fluida y buena dirección de actores (Gonzalo de Castro, Juanjo Puigcorbe y MAria Pujalte), nos presenta este partido de juveniles con punto de encuentro de las españas en Sevilla y centro de reunión generacional de hooligans patrios. Un refuerzo de la teoría de que las guerras bélicas, económicas, sociales, políticas, idiomáticas y culturales se juegan ahora en un cuadrilátero de césped con balón. Por suerte, esta noche con Alemania se juega en este terreno, porque cuando fue en la guerra de verdad, ya se sabe como nos fue.
domingo, 29 de junio de 2008
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