Vaya por delante mi admiracion por la serie Bourne.Consigue Tony Gilroy continuar con la dura filmacion de la acción, pero la sustitucion de Damon por Jeremy Renner, se acusa como la de Tanger por Manila. Sigue interesando mas Bourne, citado mil veces en la historia, que los devaneos de Renner, con el ADN alterado para aumentar su fuerza y velocidad, que como perteneciente al proyecto de espionaje del coronel Byer, tras las demostraciones a los medios del programa Tradstone, debe ser eliminado junto a una doctora, que vale por si sola el aumento del IVA. Inferior a los otros capítulos, mantiene su dignidad a pesar de su primera parte inocua, para abrir después el posible inicio y desarrollo de la quinta película. Cosa extraña cuando Gilroy era el guionista de las primeras entregas, que no haya podido sacar mas jugo a las persecuciones, paranoias, traiciones e identidades superpuestas para su obra mas personal.Rachel Weisz y Edward Norton suman su porte a la serie elíptica, como también Scott Glenn y Paddu Considine.
viernes, 17 de agosto de 2012
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