Bratz la muñeca y sigue Dios de color

Bratz no es la Barbie, Graham no es Aniston, Carell no es Carrey y el spaghetti western a la italiana que cuentan las crónicas revisan el Venecia estos días parece mas Paella western por los títulos elegidos. La segunda parte de "Como Dios", (otra vez Morgan Freeman que nos recuerda vagamente al Dios del Quico del Jueves), frente a la cual el Vaticano no se ha manifestado con la virulencia con que lo hizo con el Código Da Vinci siendo igual de peligrosa o mas, es peor que la primera. Cuenta y no asume responsabilidades, con Soderbergh como guionista y con unos efectos especiales para recrear el arca de Noé y sus animales que han presupuesto que se considere la comedia mas cara de la historia. Se enzarza con algunos pasajes de la Biblia, en plan absolutamente americano o mormón o revisionista, buscando un gag en la interpretación vulgar de la historia sagrada que podrían interpretar en cualquier curso de primaria. Me gustaría saber si algún católico o religioso se ha sentido molesto al verla o se lo han prohibido ver directamente. Sin tener excesivas creencias religiosas entiendo que hay films que molestan por el titulo y/o por el contenido. "Sigo como Dios" puede ofender a la inteligencia, que no lo pretende, por los dos motivos.