Ansiedad y empatia es lo que consiguen los interpretes del espectador que es lo que deberia ser siempre. John Krasinski, reconocido director por su capacidad de acertar el encuadre, habilidad que con la tecnica de montaje le acerca a la perfeccion. Magnificas interpretaciones hacen añicos el silencio del film mientras buscan medidas de supervivencia en novedosas y mas eficaces sugerencias en su lucha contra los seres dragon, a los que mueve solo y precisamente el ruido. Les familias han de mantenir el silencio mas total posible. Cualquier desliz puede llevarles a la muerte. Por ello los dialogos casi inexistentes, los murmullos ,signos y mucha mimica. Como la musica de Young en la escena del baile que siempre son resultonas y suelen dejar huella. Terror brillante a quien lo considere, en esta ocasion paterno. El molde es el clasico, mezclando terror apocaliptico exterior, infecciones y contactos terrorificos, sitio a un edificio conocido o familiar. Una familia que vive en una aislada granja en EEUU donde están constantemente amenazados por la existencia de unas misteriosas y mortíferas criaturas que, guiadas por el sonido, aniquilan a los humanos al más mínimo ruido. El matrimonio y sus tres hijos han desarrollado una serie de estrictos hábitos y protocolos para mantener el más completo silencio en su día a día, ya que cualquier descuido en la tarea más rutinaria podría llevarles a su total extinción. Convertida en un verdadero fenómeno en su país de origen, EE.UU., la nueva película del actor John Krasinski (13 horas: Los soldados secretos de Bengasi), que en esta ocasión compagina las funciones de director, guionista y protagonista de una película que ya es considerada como nuevo clásico del cine de terror. Inspirado por el silencio tenso que inundaba su casa poco después de tener a su segunda hija, Krasinski hace en su tercera película como realizador un particular homenaje al cine mudo y a su capacidad para, a través de la imagen y el simple sonido de ambiente, despertar en el espectador sentimientos de emoción o puro miedo. De este modo, Un lugar tranquilo realiza un inteligente y sorprendente uso de los silencios, así como de una atmósfera que juega con la música, el sonido y una amenaza que permanece la mayor parte del tiempo en las sombras para crear un clima de tensión constante bajo el que se esconde una historia de amor familiar. Junto a Krasinski, que vuelca en la producción sus propios temores como padre, habitan este entorno claustrofóbico y postapocalíptico su esposa Emily Blunt (La chica del tren) y los jóvenes Millicent Simmonds (Wonderstruck. El museo de las maravillas), Noah Jupe.
jueves, 26 de abril de 2018
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario