El film de Albert Serra es bello. Pero también un poco inasequible, de narrativa complicada y equidistante de lo clásico y de las nuevas propuestas mas modernas. Serra abre el camino en solitario como hicieron antes otros pioneros que eligieron el desierto como un espacio que pintar, filmar, vencer, atravesar y sobrevivir.
Sus personajes, Lluis Carbo, Lluis Serrat Batlle, Lluis Serrat Massanellas, Montse Triola y Victoria Aragones, caminan, descansan, discuten sobre que camino elegir al mismo tiempo que nos narran sus sueños mas personales. Discurre el film en paisajes tan maravillosos como los de Islandia o las islas Canarias y son retratados con cámara digital en blanco y negro, muy contrastado y de un crepuscular sin grises. Una clase magistral de fotografía cinematográfica..
Si en Honor de caballería nos narraba el autor la decrepitud física de los caballeros andantes tipo quijote y sancho, filmados en posadas por los alrededores de la catalana Banyoles, ahora nos muestra el camino de la estrella que condujo a los tres reyes o majestades al portal de Belén donde nació el niño. Pensábamos nosotros que ofrecían oro, incienso y mirra y ahora sabemos que querían algo a cambio.
domingo, 21 de diciembre de 2008
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