Estomago

Ha pasado mucho desde El festín de Babette. Las películas gastronómicas con historia de amor en la cazuela me entusiasman y no os las recitare hoy. El film de Marcos Jorge, ítalo brasileño, esta contado en dos tiempos y es mas durillo que los que hasta hoy han sido. Y en dos planos nos relata las experiencias carcelarias del protagonista Joao Miguel y su ascensión en diferentes restaurantes hasta llegar a los mas selectos. Aquí lo que hay en la cazuela es el poder, que también se puede conseguir con buenos ágapes, pero que no es tan romántico ni mucho menos. Como el tema no están fácil de demostrar nos quedamos con hambre entre tanto drama social.
Estomago pierde la conexion con el publico cuando los primeros planos dejan de mostrar con detalle, legumbres, mariscos, carnes rojas, pasta, pescados y salsas variadas. El expresidiario utiliza con poca delicadeza el material recitado y mas que un placer sofisticado quiere buscar una alternativa su desesperada vida.
Una combinacion que ha arrasado en festivales, jugando la baza de la comedia con la que no se juega en las escenas culinarias y que habría funcionado mejor si en vez de según que platos de sátira social, hubiera ofrecido una sopa de bogavante con setas variadas. El estomago y el espectador lo hubieran agradecido.