Nada que ver con la inquietante Revenge de Kevin Costner. Dos secuencias eliminan inmediatamente el film de la lista de visibles dignamente. La resurreccion de una mujer despeñada y si los dos protagonistas que se persiguen alrededor de una casa minimalista tienen aun unos 10 litros de sangre, en el rio suelo hay al menos 50. Ni Tarantino, en la mejor de sus alucinaciones hubiera sido capaz. Si se trataba de mostrar un proceso de momificacion, bien, si era pasar por encima del espectador con un tractor, tambien. Tres hombres se reúnen para su escapada de caza anual, aunque, en esta ocasión, el propietaro de la magnifica casa, se presenta aparece con su joven amante. La belleza en bañador, no tarda en atraer la atención de los otros dos, hasta el punto de ser violada por uno de ellos. Tras amenazar a su acompañante con revelar la infidelidad a su mujer de no hacerse justicia, es perseguida y dada por muerta en el desierto. Sin embargo, conseguirá sobrevivir, y convertirá a sus agresores en presas de una sangrienta venganza. Por encima de la acción y la violencia que no escatima esta película aclamada logicamente enSitges, "podria" ser una historia de transformación personal, la de una joven frívola e ingenua, convertida en objeto para satisfacer los deseos sexuales de los hombres, que se convierte en una mujer fuerte, brutal e implacable que no se deja manipular ni abusar. Con este mensaje de femenino, Coralie Fargeat debuta detrás de las cámaras en una ópera prima, donde la venganza se convierte en el vehículo para que la protagonista recupere las riendas de su vida, arrebatadas por tres sádicos hombres desabridos. Matilda Lutz (Rings) es la despiadada heroína de acción en esta cinta que "discute" el trato de la mujer en el cine a través de una historia, no exenta de simbología, plasmada en la pantalla con una mediocridad notable a a pesar del potente entorno visual donde no faltan momentos de un gore ad infinitum. Completan la carne de cañon del reparto Kevin Janssens (Vermist), Vincent Colombe (Rosalie Blum) y Guillaume Bouchède.
jueves, 6 de septiembre de 2018
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