Desapercibida para mi, la primera realización de este director valenciano, José Enrique March, "La estancia", nos sorprende ahora con un film bienintencionado, que visto por nuestra colectividad, podría hacer subir y mucho nuestra capacidad de comprension lectora, hoy tan cuestionada. Lectora y musical, porque este film que seria muy aplaudido en Finlandia, narra la sensible e impactante historia de un niño prodigio al piano, que apartado por su soledad y abandono de un entorno al que parece no pertenecer, es recuperado para la interpretacion por otro músico, violinista, que le abre una nueva y provechosa visión del mundo.
También coincide en su reingreso activo al universo musical, la irrupción en su vida y en el filme del procer paterno, con lo que completa parcialmente el puzzle relleno de corcheas y semicorcheas de su vida. Melo con moraleja, donde dejan su impronta de personalidad Javier Rios, Silvia Abascal y Antonio Dechent en una cinta/dvd de cabecera que debería rellenar algunas horas de las casi 4 que dedicamos a la television sin elección o criterio. Con escuchando a Gabriel estamos injertando la mejor serie cultural con un concierto de clasica de mañana en la 2 o el 33.
miércoles, 5 de diciembre de 2007
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