Una mano cortada escapa de la sala de disección de un hospital de París. Su propósito es reunirse de nuevo con su todo, el cuerpo al que perteneció. Y éste es el de un joven al que la fortuna no le ha sonreído demasiado empezando por el trágico fallecimiento en accidente de su madre cuando era pequeño. Es el punto de partida de ¿Dónde está mi cuerpo? (J’ai perdu mon corps), cuya acción principal transcurre en 1994. Un premiado largometraje de animación que es además obra de un debutante. Después de tres cortos, el francés Jérémy Clapin ha dirigido la adaptación de un libro de Guillaume Laurant. Los galardones que ha obtenido hasta el momento son el Gran Premio de la Semana de la Crítica en Cannes, mejor largometraje y premio del público en el Festival de Animación de Annecy, mejor película en el Festival Europeo de Cine Fantástico de Estrasburgo y premio a la mejor banda sonora (compuesta por Dan Levy) en el Festival de Sitges. Buen trabajo del equipo, sobre todo por la animación. Que haya sido recompensado en un festival que combina las películas de imagen real es muy interesante para la animación. Empezar la historia con una mano cercenada puede ser macabro, pero nada más lejos de la realidad. Está llena de poesía. Interesado llevar la poesía a sitios donde no ha sido invitada. Y quizás sí que lo de la mano cortada dificultó que tuviéramos problemas para encontrar financiación porque la gente veía el órgano, la mano, pero no la poesía que conllevaba Un desafío, que el público empatizara con la mano hasta el punto de interesarse por lo que pudiera pasar. Pero la mano no tiene ojos, ni boca… así que se inventaron un lenguaje corporal y fílmico que explicara incluso lo que podía pasar por el interior de este personaje. La idea era hacerla en stop-motion, pero era muy complicado al exigir más acción. Se eligio el dibujo porque es mas real y preciso. Permite que sea muy real y muy pictórico, y más en una película que tiene varias escalas. Poder hacer planos más cercanos o más generales.
En el libro ya está toda la aventura de la mano escapándose del hospital, el encuentro con las ratas,etc. Lo que se añadío fue la sensibilidad sonora. También la escena en la portería, a través del interfono, en la que conocemos a Gabrielle (de momento solo con la voz), y también símbolos como la mosca, que da más arquitectura al relato, o el iglú, las grúas o las fábricas. _Más cerca de Pixar porque narran las historias.y pueden proponer otros temas. En connivencia con el cine asiático, surcoreano en especial, mezcla elementos de angustia, poésia, humor con escenas dramáticas, camino del cine fantástico.
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