El baño del papa

Aprovechando el rebufo de su visita a EEUU, sus disculpas de pedofilia y sus bendiciones a los pocos católicos existentes ahí, se estrena en nuestros lares la crónica de otra visita papal en 1988 de jUan PAblo II esta vez a Ecuador. Enrique Fernandez y Cesar Charlone han diseñado un film entre triste y esperanzado, ácido y amargo, divertido y de denuncia documental. Un pueblo obligado a vivir del contrabando compagina su existencia para sobrevivir con las recomendaciones papales sobre los oprimidos. Un discurso vacío que engulle las esperanzas de los que, cuando acabe la aparición, deberán volver a las andadas y a recoger como mucho las migajas de la fiesta blanca y luminosa. Todo el negocio montado alrededor, empanadas y chorizos incluidos, debe desaparecer y ser tragado por una distribución expectante e ineficaz, en un mercado irreal donde no hay ninguna capacidad económica. Un semi documental cruel que demuestra la capacidad de sufrimiento del personal humillado ancestralmente por sus gobiernos y religiones. Descarnada crónica del esfuerzo de una empobrecida población para sacar tajada de la venta de cuatro recuerdos, sin contar con que los propios clientes sos sus congéneres de Melo, igual de pobres. Neorrealismo limite donde se cobran como no, las visitas al urinario. Excelentes los actores y la precisa ambientacion. Un baño al sistema vamos.