Sentencia de muerte

Nick Hume se muestra preocupado por la vida de sus dos hijos. Mientras Brendan va a empezar una carrera en la Universidad, Lucas no encuentra su lugar en el mundo. Una fatídica noche, Nick y Brendan regresan de un partido de hockey cuando paran en una gasolinera. Nick llena el depósito y Brendan va a la tienda, pero nunca saldrá de allí: la banda callejera de los Darley le asesina cruelmente sin que su padre pueda hacer nada. Motivado por la venganza, Nick decide tomarse la justicia por su mano.
"¿Hasta dónde llegarías para proteger la vida de los tuyos?". Un drama en clave de thriller que cruza los destinos de dos familias destrozadas por la muerte y la venganza. La película está basada en la novela homónima de Brian Garfield, pero se ha añadido un marco más contemporáneo en el que la violencia forma parte de la sociedad y las drogas y las armas son fáciles de encontrar. Su realizador es James Wan, un amante del cine de terror que ha apostado por un proyecto más suave después de escribir y dirigir la ya mítica "Saw" y el cuento Silencio del mal. Como protagonista encontramos a Kevin BAcon, un padrazo vengador y con razon. Su contrapunto en la ficción es John Goodman y la agente encargada de su caso está interpretada por Aisha Tyler, actriz en una de las temporadas de "24". Además el trabajo de Kelly Preston. Después de la polvareda levantada por "La extraña que hay en ti", que por no censurar los actos execrables de justicia paralela que perpetraba una muy cabreada Jodie Foster recibió más juicios morales que cinematográficos, Wan enfila la misma ruta, es decir la del visceral ojo por ojo, la del Código de Hamurabi de toda la vida, la de la justicia no vale un pimiento, así que más vale tener una recortada en casa, por lo que pudiera pasar. Enésima revisión de la fisionomía del cine de venganza, que ejecuta del primero al último todos los lugares comunes del subgénero, es una nueva vuelta de tuerca a la mística del ciudadano ejemplar, padre modelo y mejor vecino que, empujado por las circunstancias, se convierte en una alimaña con sed de sangre balsámica.
La individualidad corrompida por una colectividad torcida. La integridad moral del individuo asediada por las disfunciones de la moral colectiva y sus fantasmas, por las fiisuras de un sistema empeñado en echar a perder a todo buen ciudadano que se precie, pero sin variaciones, con una narración lineal y de piñón fijo que si esboza, esta vez sí, el sinsentido del ejercicio alegal de la justicia en el contexto de un thriller rutinario que, no da tregua en un frenético camino de perdición salpicado por contadas secuencias de acción francamente recomendables. Wan, que deslumbrara con su debut como director y guionista en la ultrajadísima "Saw", desprestigiada por sus muy horrendas secuelas. La pelicula no es sino un estimulante cambio de registro en el que, a pesar de las insuficiencias crónicas de un guión, expone sus muchas virtudes como jefe de orquesta haciendo oposiciones a director en cartera para superproducciones y secuelas de estudio. Su tercera película es, a pesar de los pesares, un entretenimiento solvente, de los que no consienten consultar el reloj, maximo 20 minutos, a pesar de la explotación de una fórmula tan trillada como de efectos secundarios previsibles.