domingo, 18 de marzo de 2018

el insulto

Un film de juicios, en el que el juez a martillazos va dando pie a los dialogos histrionicos, a las intervenciones que denotan un bajo nivel y para compensar, parrafadas de consideraciones juridicas deslumbrantes. Cine procesal que no deja de desear, recordando frases, la muerte y el exterminio a sus vecinos. Sera por los tiempos que corren pero una joven abogada interpreta la defensa y una señora preside el tribunal. Aunque le va bien para mostrar como un pequeño juicio puede fermentar las masas tambien denuncian que la justicia, al menos la mayuscula debe estar por otros temas. En el Beirut de hoy, una discusión y un insulto alcanzarán una dimensión inesperada. La disputa entre un libanés cristiano, y un refugiado palestino, no deberia llegar hasta los tribunales, donde protagonizará un largo y mediático juicio que llevará a intervenir al propio Presidente y enfrentará a nivel nacional a las dos religiones, que sacarán a relucir sus diferencias en las calles. El Libano, acosado por los problemas religiosos e ideologicos, no deberia llegar a los tribunales un a discusion entre dos obreros por unas goteras y menos que casi provoque una guerra civil. Con el país al borde del estallido social, se replantearán su vida y sus prejuicios. Hace unos años, el director Ziad Doueiri (El atentado) en su cuarto film, que huyo a EEUU a los 20 años para estudiar tuvo una acalorada discusión en su Líbano natal con un fontanero, lo que le llevó a, posteriormente, disculparse con él y ayudarle a recuperar su empleo, que había perdido precisamente por este incidente. Con la convicción de que esta historia era buen material para un film, Doueiri la utiliza para componer la trama de un drama judicial que ha sido candidato al Oscar a Mejor película de habla no inglesa.  De este modo, el duelo en los tribunales de sus dos protagonistas sirve para hablar sobre el estado actual de la sociedad libanesa, y de cómo se ha aplicado la política del olvido. La dignidad y el honor, si se han perdido, se pueden recuperar de otras maneras, tan civilizadas y menos costosas. Al frente de este optimista y humano relato se encuentran Adel Karam (¿Y ahora adónde vamos?), Christine Choueiri y Kamel El Basha, a los que acompañan Camille Salameh (Stable Unstable) y la debutante Rita Hayek.

No hay comentarios: