Pablo de Tarso, antiguo azote de los cristianos reconvertido a la fe de Cristo, pasa sus últimos días en una prisión romana, a la espera de la ejecución ordenada por Nerón. Aunque ni sus carceleros entienden el peligro que representa este hombre, su hora se acerca. Con gran peligro, Lucas visitará al anciano para confortarlo y transcribir y sacar clandestinamente sus cartas a las comunidades de creyentes, perseguidas brutalmente por Roma, pero que conseguirán difundir el Evangelio y cambiar el mundo. Cine bíblico para, en esta ocasión, narrar los últimos días de Pablo de Tarso, un cruel fustigador de cristianos que terminó convirtiéndose a la fe católica, y cuya labor de evangelización, que le llevó a recorrer más de 16.000 kilómetros, fue crucial para el futuro de esta religión, otorgándole un papel primordial en las Sagradas Escrituras. En Pablo, el apóstol de Cristo, esta figura comparte protagonismo con Lucas, autor del evangelio que lleva su nombre, que le ayudó a hacer llegar sus últimas cartas a las crecientes, pero perseguidas con fiereza por el imperio romano, comunidades de cristianos. Estos encuentros sirven al director Andrew Hyatt (Llena de gracia) como hilo conductor para contar los pasajes más destacados de la vida de Pablo que aparecen en la Biblia, y que a su vez sirven como retrato de los difíciles primeros años de la Iglesia. Jim Caviezel (Plan de escape), vuelve al género religioso para interpretar en esta ocasión a Lucas, mientras que James Faulkner (Atómica) hace lo propio con Pablo. Les secundan Olivier Martínez (El médico) y Joanne Whalley.
viernes, 23 de marzo de 2018
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