Si la cosa funciona /Whatever works

Estrenada de tapadillo, al no llevar el nombre de Barcelona en el titulo, nos llega otra madura y magistral comedia de Woody Allen  que para celebrar sus 30 de Manhattan regresa a su Nueva York querido. 92 minutos que relativizando la ironia es para pensar en suicidarse. Pero como decia el maestro cuando habia el Concorde, te suicidas en NY y cuando llegas a Paris todavia estas vivo. Porque el film es una gran comedia. Ligera pero con un talento dificil de encontrar en la cartelera de los ultimos años. Dialogos ingeniosos, inteligentes, inteligibles, pero vertiginosos con una cadencia de casi 30 segundos y que obligan al espectador a una atencion que muchos no aguantan y sintiendose burlados por el burlador comico, dicen que no les gusta. Con una construccion milimetrica de la historia, va intruciendo nuevos personajes que acaban tirando del relato. Son Larry David y sus amigos, la poco espabilada Evan RAchel Wood que esta inconmensurable y con la que inicia una relacion. Cuando esta, piensa Allen, que ya no da para mas pone un motor en marcha a mil revoluciones por min. que es Patricia Clarkson, para chocar un poco mas alla con un padre, el recuperado Ed Begley Jr., consiguiendo entre si, de nuevo, otras secuencias magistrales.
Guia de lujo de NY, nos situa sus conversaciones en sus calles, bares, parques, restaurantes y suites, siempre rodeando a sus personajes de gente friki o cool, como para preservarlos. Allen vuelve a su cine familiar, intimo, el que le gustaria seguir rodando con Annie Hall, sin tener que pagar tributo comercial a las estrellas del momento. Y lo mas importante, se ve que sigue buscando su alter ego en la pantalla, a medida que va avanzando en la edad.
Aqui le interpreta el televisivo Larry David, un fisico parlanchin, que detesta todo lo que le rodea en su contemporaneidad y huele a ser humano. Habla como si escupiera y encima se cree un premio nobel, o sea un woody cargante al limite. Film con interesantes monologos o filipicas, que dirigiendose a la pobre gente que se cruza con el en la pantalla, sabe el espectador que ha podido aguantar el ritmo, que se lo esta diciendo a él. Una sesion gimnastica de filosofia popular para este cerebro abotargado de tanta champions y tanto concurso pelon.