Bruce Steers irrumpió en las pantallas con Igby goes down, iniciándose en un contexto de ciertas pretensiones pero con indudables aciertos sobre la diversión. Entre otras razones, por la entrañable apuesta por la fantasía infantil y juvenil y donde sin tapujos no se esconde de que sus comedias preferidas son las de los 80. También es importante la eficacia de un guión ingenioso que por una vez no confunde el humor blanco con la ñoñería.
De todas maneras el filme recibirá el rechazo de los que lo consideren un subgénero, que lo es, o una exposición de ídolos prefabricados como son Zac Efron, Leslie Mann, Michelle Trachtenberg o Matthew Perry.
Comedia pues juvenil americana, y van mas de 17, diseñada a la medida de estos actores citados y que son indiscutibles ídolos de los adolescentes de todo el mundo. Por su calidad dentro de que no engaña, se enmarca el filme en la linea de producción profesional de High School Musical.
viernes, 1 de mayo de 2009
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