sábado, 9 de mayo de 2009

Hannah Montana: la pelicula

Myley Cyrus es como la película y sus canciones. Entusiasta, modesta y agresiva a la vez. Peter Chelsom es otro de los grandes anglosajones actuales. Con Algún día te encontrare, Enredos de sociedad, Funny bones, Serendipity, Shall ve dance? y Un mon a la seva mida se ha limitado esta vez a proteger la marca Hannah y lo ha cumplido sin mas relevancia ni dificultad. Con ello complace a las jóvenes seguidoras y a la Disney. Para el resto de cinéfilos o aficionados no existe mas razón que facilitar una salida con los púberes familiares e intentar explicar que todos los mitos se hacen mayores inevitablemente mientras no se invente definitivamente el reduccionismo caníbal.
Es inútil por tanto comprender el secreto de este fenómeno. Comercial, astucia del carisma, infantilismo globalizado, mercado de los modelos de conducta?. Quizá los mensajes del amor familiar, sobre la normas de la comunidad y los envíos ecológicos sean lecciones que penetren mas con esta mensajero del bien mundial. Trabajo nada fácil pero duro que esconde en realidad que toda joven en edad de merecer, si se esfuerza, puede llegar a ser una estrella de disney.
Lucro y marca alrededor de una aserie de television que sigue una carrera musical desde la infancia, nosotros teníamos a nuestra Marisol y nuestro Parchis o Garabato o Pablito Calvo, con sus giras de conciertos, el merchandaising mas horrible y este film con Billy RAy Cyrus y su hija, todos vendidos a Disney con Vanesa Williams y Lucas Till, que finalmente optaran por mantener su fama en secreto. Lo dicho, difícil de comprender esta vez, Chelsom.

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