Elemento virtual de la movida madrileña del cine, según reza todavía una pancarta anunciando el estreno en una plaza de Madrid. Quien se redime en su debut cinematográfico es Antonio Gonzalez-Vigil, opera prima si, porque la edad el autor no tiene que importar a nadie aunque pase de los 50.
Paseado por todo festival español que lo hay aceptado, narra las vicisitudes de un psicoanalista y un policía, por no decir ninguno, con pocos escrupulos. Fausto Colado y Eduardo Blanco, siempre los habíamos visto en papeles mas divertidos y suaves, tienen un curioso concepto del amor, que no sirve para nada en la Diada de Sant Jordi de hoy en Catalunya. Especialmente por su misoginia y su antifeminsmo que puede llegar a violentar al sexo contrario en este caso y bien hecho que harán. Interpretan las vilipendiadas feminas Maria Marull, Dalia Elnecave, y Veronica Bonter.
El director tuvo que rodar en Argentina precisamente porque Catalunya y Euskadi le negaron las subvenciones por sus contenidos. Queda todo dicho, en flor o no.
jueves, 23 de abril de 2009
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